Con los perros mayores hay que tener especial atención a las horas de máximo calor. Es muy importante evitar en todo momento paseos largos y sitios donde carezcan de sombra en las horas con temperaturas más altas, por ello recomendamos que los paseos se hagan durante primera hora de la mañana y última, siendo esta, la más adecuada ya que nos servirá a nosotros para relajarnos durante ese paseo. 

Una de las principales causas por las que se tiene que tener cuidado, además de poder sufrir una insolación, es que, si nuestro perro camina sobre un suelo que recibe los rayos del sol directos, estos pueden dañar las almohadillas e incluso se pueden producir quemaduras en la mismas. 

Estas quemaduras pueden provocar en algunos casos cojera, por lo que es muy recomendable aplicarles un protector de almohadillas y sobre todo, como ya hemos comentado, evitar que caminen en suelos expuestos al sol directo.

Recomendamos la crema para almohadillas de la marca Style and Dog.

Por otro lado, aconsejamos llevar bebederos portátiles siempre, para poder ofrecer agua a nuestra mascota cuando veamos que tiene sed, ¡y no solo en verano! Pues la hidratación de nuestro perro de edad avanzada es muy importante. 

 Además, a consecuencia del calor, los perros mayores también pueden ver reducido su apetito por lo que deberíamos ofrecerles más tomas al día, evitando el medio día y siempre pasado un tiempo después del paseo.

¡Atención! Es importante echarle un ojo a la respiración de nuestro perro, si en algún momento notáramos que nuestro perro tiene una respiración acelerada persistente, lo más recomendable sería acudir a nuestro veterinario en la mayor brevedad siendo este el que verifique su estado de salud.

La importancia del tamaño del perro y el calor 

Sí, has leído bien. El tamaño de tu mascota es relevante a la hora de hablar del calor y cómo le afecta.

Los perros de menor tamaño están más expuestos a sufrir un aumento mayor de la temperatura corporal que los perros más grandes debido a su cercanía al suelo. Esto provoca que el calor acumulado en este se proyecte sobre el cuerpo de nuestro perro y por este motivo, hay que tener especial cuidado con los perros pequeños o de partas cortas. Evita sobretodo suelos de asfalto, cemento piedra, etc.