¿Has tenido que llevar recientemente a tu perro al veterinario? ¿Le han recetado alguna pastilla? ¿Te has vuelto medio loco para conseguir que la mascota se tome sus pastillas? Hoy vamos a explicar algunos trucos para darle una pastilla a nuestro perro.

Suele ser muy difícil hacer que nuestro perro ingiera una pastilla, pero si el veterinario nos la ha recetado deberemos conseguir que se las tome si queremos que se cure nuestro perro.

El primer consejo que te damos, como con muchos otros hábitos, es acostumbrarle desde que son cachorros (no le auto-medicaremos simplemente para acostumbrarlo, claro está), pero si afortunadamente no has tenido ocasión para darle estas píldoras, a continuación te contamos algunos consejos más.

Los premios siempre son una buena manera de hacer que nuestro perro aprenda a hacer cosas, y por qué no, a ingerir comprimidos. Cada vez que consigas que tu mascota se coma una pastilla, sale de premio sus galletas favoritas, o alguna chuchería especial para perros. De esta manera se irá acostumbrando y dejará de ser imposible hacer que se trague algo que no le gusta.

Otra manera de conseguir que se tome su pastilla es esconderla. Esta forma es mucho más rápida que el proceso de los premios, pero tiene el inconveniente de que si nuestro perro nos descubre, la puede escupir.

Por eso debemos de ser cuidadosos y esconderle la pastilla en algo que le guste mucho, como dentro de una salchicha por ejemplo, y seguramente ni se de cuenta de que se la ha tragado. Si las pastillas son muy grandes, las podemos partir en trozos más pequeños y esconderlos en varios trozos de comida.

Hay gente que también tritura las pastillas y las mezcla con comida más líquida, como puede ser un poco de guiso. Pero antes, pregúntale al veterinario si se puede partir o triturar las pastillas.

Si después de todo esto no has conseguido que tu perro se coma la pastilla, deberás hacerlo “por las malas”. Abre su hocico e introduce tu mismo la pastilla en su boca, lo más al fondo que puedas, y después cierra la boca del animal. Lo normal es que se la trague al momento, pero estate al tanto de que no la escupa.